miércoles, 2 de noviembre de 2011

CABINA DE FLUJO LAMINAR


 INTRODUCCIÓN
Accidentes como las rupturas, salpicaduras cortes y pinchazos en el ejercicio de la practica en laboratorio clínico, así como la inhalación de  aerosoles con potencial infeccioso que son generados en el pipeteo, flameado, apertura de recipientes a diferente presión de la presión atmosférica, agitación, centrifugación, etc. originan la posibilidad de contagio de buena parte de las infecciones adquiridas en laboratorios  clínicos.
De la adecuación de una buena estrategia de seguridad depende la integridad del personal de laboratorio. Esta deberá tener en cuenta el evitar la liberación de material peligroso al ambiente así como la reducción de las consecuencias de la liberación de dicho material, mediante un sistema de protección colectiva y la protección al trabajador frente al contacto de materiales peligrosos. Es así como en dicha estrategia de seguridad la cabina de flujo laminar ofrece la protección del producto manipulado, como la del trabajador, sumándose a esta necesidad la protección del medio ambiente laboral y de la comunidad.





El funcionamiento de estas cabinas se basa en la dinámica de flujos de aire limpio y sin turbulencias sobre el trabajo que se realice, El área de trabajo es recorrida por un flujo descendente de aire estéril (Flujo Laminar Vertical).
La protección del trabajador es dada gracias a la barrera de aire formada por la entrada de aire desde el cuarto que la contiene a través de la abertura frontal y por el flujo de aire filtrado estéril,
Ambos flujos de aire son conducidos a través de unas rejillas situadas en la parte anterior y posterior del área de trabajo a un plano desde el cual el aire es redistribuido. Un tanto por ciento del mismo es extraído mientras que el resto es recirculado sobre el área de trabajo, siendo siempre filtrados por el filtro HEPA tanto el aire recircularte como el extraído al menos una vez.
El número de ventiladores es variable algunos fabricantes utilizan solo uno para la recirculación y extracción, otros utilizan hasta tres; dos para recirculación y uno para extracción.
El ventilador o ventiladores fuerzan el paso del aire de la cabina y el que penetra por la abertura frontal, a través de rejillas situadas en la parte frontal y posterior del área de trabajo.
La disposición de ventiladores y filtros debe asegurar que todas aquellas zonas del circuito de aire contaminado (no filtrado) se hallan a presión negativa, de modo que ante cualquier eventualidad el aire no pueda escapar al exterior de la cabina.


Al iniciar el trabajo

-          Conectar a una fuente de110 o  220 voltios.
-          Poner en marcha la cabina durante 5-10 minutos, a fin de purgar los filtros y "lavar" la zona protegida.
-          Comprobar que el manómetro situado en la parte superior del frontal se estabiliza e  indica la presión adecuada (varía con el modelo de cabina).
-          Apagar la luz ultravioleta (si estuviera encendida) y encender la luz fluorescente.
-          Limpiar la superficie de trabajo con un producto adecuado (por ejemplo, alcohol etílico al 70%).
-          Antes y después de haber trabajado en una cabina deberían lavarse con cuidado manos y brazos, prestando especial atención a las uñas.
-          Se aconseja emplear batas de manga larga con bocamangas ajustadas y guantes de látex. Esta práctica minimiza el desplazamiento de la flora bacteriana de la piel hacia el interior del área de trabajo, a la vez que protege las manos y brazos del operario de toda contaminación.
-          En algunos casos, además es recomendable el empleo de mascarilla. 


Normatividad.

Aplican las normas para laboratorio clínico.
Resolución 1043 de 2006,  sobre la preparación de la muestra, la utilidad clínica e interpretación de los resultados.
Decreto 2676 de 2000, Ministerio de la Protección social sobre el buen manejo de residuos hospitalarios, la Seguridad y Salud Ocupacional.
Decreto 77 de 1997 establece normas de regulación laboratorios clínicos y se autoriza ministerio de salud para reglamentar normas técnicas.
Además de la anteriormente citada BS 5726, existen otras normas como: U.S. National Sanitation Foundation std. 49 (1976); Australian Standard 2252 part 1 and 2 (1979-80); German Rearch Association 1979 RFA, que hacen referencia al uso, construcción y funcionamiento de estas cabinas, clasificándolas en los tres tipos denominados: Clase I, Clase II y Clase III y anterior mente citados.
Norma EN 12469 de 2001 Biotecnología, criterios de funcionamiento para las cabinas de seguridad microbiológica.
El proceso de certificación de las cabinas de seguridad    biológica está reglamentado por el
Estándar NSF 49,




RESULTADOS:
Se entendió el concepto de flujo laminar y como opera en la cabina de flujo laminar para proteger el ambiente , la muestra y el personal de laboratorio, así como las precauciones a seguir en la utilización de esta erramienta de analisis.




REFERENCIAS:

VELANDIA CEPEDA (Carlos Adrian) “Accesorios” Internet. VARGAS CHAVES (William Mauricio) “Explicación de Acido, Base, Alcalinidad”. Internet.
VELANDIA CEPEDA (Carlos Adrian) VARGAS CHAVES (William Mauricio) “   ”. Internet.




Durante la manipulación.

-          Todo el material a utilizar (y nada más) se sitúa en la zona de trabajo antes de empezar. De esta forma se evita tener que estar continuamente metiendo y sacando material durante el tiempo de operación.
-          Es aconsejable haber descontaminado el exterior del material que se ha introducido en la cabina.
-          Este material se coloca con un orden lógico, de manera que el material contaminado se sitúa en un extremo de la superficie de trabajo y el no contaminado ocupa el extremo opuesto de la misma.
-          la zona de máxima seguridad dentro de la superficie de trabajo varía Según el tipo de manipulación y el modelo de la cabina,. En general, se recomienda trabajar a unos 5-10 cm por encima de la superficie y alejado de los bordes de la misma. Es muy importante no obstruir las rejillas del aire con materiales o residuos.
-          Una vez que el trabajo haya comenzado y sea imprescindible la introducción de nuevo material, se recomienda esperar 2-3 minutos antes de reiniciar la tarea. Para permitir  la estabilización del flujo de aire.
-          Tener en cuenta queel flujo laminar se ve fácilmente alterado por las corrientes de aire ambientales provenientes de puertas o ventanas abiertas, movimientos de personas, sistema de ventilación del laboratorio.
-          Evitar los movimientos bruscos dentro de la cabina. El movimiento de los brazos y manos será lento, para así impedir la formación de corrientes de aire que alteren el flujo laminar
-          No debe utilizarse el mechero Bunsen, pues por su origen su manera de funcionamiento la llama crea turbulencias en el flujo y además puede dañar el filtro HEPA.
-          Cuando deban emplearse asas de platino es aconsejable el incinerador eléctrico o, mejor aún, asas desechables.
-          Si se produce un vertido accidental de material biológico se recogerá inmediatamente, descontaminado la superficie de trabajo y todo el material que en ese momento exista dentro de la cabina.
-          No se debe utilizar nunca una cabina cuando esté sonando alguna de sus alarmas.